Un exdirector de investigaciones de la procuraduría general de México declaró a funcionarios que indagan la desaparición de 43 estudiantes en 2014 que la llamada "verdad histórica" que se le presentó a la población semanas después de los acontecimientos fue una narrativa elaborada por las máximas autoridades del gobierno durante reuniones en las que participó el entonces presidente Enrique Peña Nieto, informó un medio noticioso mexicano el lunes.
Tomás Zerón, prófugo de la justicia que actualmente se encuentra en Israel y lejos del alcance de las autoridades policiales mexicanas, dijo a los investigadores que el entonces mandatario y miembros de su gabinete de seguridad estuvieron presentes, informó el colectivo de periodismo independiente Fábrica de Periodismo.
El medio reprodujo las respuestas de Zerón a un prolongado interrogatorio que le envió el máximo funcionario en materia de derechos humanos en el país, Alejandro Encinas, en 2022 y el cual fue difundido tras una solicitud de acceso a la información.
La versión de la "verdad histórica" aseguraba que la policía local entregó a los estudiantes a un cártel local de narcotráfico en la ciudad de Iguala. El grupo delictivo supuestamente asesinó a los estudiantes, incineró sus cuerpos en un vertedero en la comunidad cercana de Cocula y posteriormente arrojó los restos a un río.
Investigaciones posteriores realizadas por expertos independientes y la Procuraduría General de la República, y corroboradas por la Comisión de la Verdad que se estableció para dar seguimiento al caso, han desestimado la idea de que los cuerpos fueron quemados en el vertedero.
Se llegó a la conclusión de que un grupo local del narcotráfico sí estuvo involucrado, pero la Comisión de la Verdad cree que también hubo participación de elementos corruptos de las fuerzas armadas y policiales de todos los niveles.
Encinas había hecho referencias anteriores a las reuniones de alto nivel entre funcionarios para discutir la versión de la "verdad histórica", pero sin identificar a los presentes.
De acuerdo con Zerón, a las reuniones acudieron el presidente, su gabinete de seguridad y el ex procurador general Jesús Murillo Karam, a quien se le acredita el término de la "verdad histórica" para referirse a la explicación de la desaparición de los estudiantes y que se encuentra en arresto domiciliario a la espera de un juicio. Peña Nieto reside actualmente en España.
Zerón, quien está acusado de tortura y desaparición forzada, no dio detalle alguno sobre la participación de Peña Nieto, limitándose a decir que estuvo presente en las reuniones.
Encinas, quien renunció a su cargo el año pasado, ha dicho que le ofreció a Zerón un acuerdo a cambio de su cooperación en la investigación.
Al preguntarle sobre el caso el lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que Zerón debería entregarse. Añadió que sería de mucha ayuda que regresara al país a rendir una declaración y asumir responsabilidades.
López Obrador tiene programada una reunión el martes con familiares de los estudiantes desaparecidos, en el que sería su último encuentro antes de dejar el cargo a finales de septiembre.
Familiares de los estudiantes desaparecidos realizaron el lunes su marcha mensual para exigir justicia en las calles de la capital mexicana.