Las repercusiones del operativo realizado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU. (ICE, por sus siglas en inglés) en un restaurante de South Park continuaron este martes, cuando líderes sindicales locales organizaron una manifestación frente al tribunal federal en el centro de San Diego para condenar el operativo.
"Esta administración ha desatado una ola de terror", declaró Christian Ramírez, director de políticas del sindicato SEIU USWW. Señaló que lo ocurrido el viernes en Buona Forchetta recuerda a una dictadura.
La orden judicial, revelada el lunes por la tarde, alega que los trabajadores de Buona Forchetta están siendo explotados y laboran turnos de 12 horas sin descansos.
Lorena González, presidenta de la Federación de Sindicatos Laborales de California, afirmó que el operativo no tenía como objetivo ayudar a los trabajadores, sino que fue una táctica de intimidación.
“Nos dijeron que se trataba de criminales y de hacer más seguro a Estados Unidos", comentó. "Pero quienes llevamos años trabajando con la comunidad inmigrante sabíamos que eso era pura basura.”
Buona Forchetta colocó un aviso en su puerta informando que todas sus sucursales en los condados de San Diego y Orange permanecerían cerradas el lunes y martes. Un hombre se presentó la mañana del martes para dejar flores en honor a los trabajadores arrestados, sumándose a una docena de ramos colocados en apoyo a ellos.
La orden judicial alegaba que 19 de los trabajadores, es decir, alrededor del 50%, usaron tarjetas de residencia falsas para obtener empleo.
Brigette Browning, presidenta del Consejo Laboral de los Condados de San Diego e Imperial (AFL-CIO), señaló que eso no justifica el despliegue de fuerza del viernes.
“Esposaron a trabajadores, detonaron explosivos cerca de familias y dejaron a empleados y seres queridos temblando del miedo", dijo. "Esto es lo que pasa cuando los políticos tratan a las personas como si fueran blancos de ataque.”
Según la orden, el Departamento de Seguridad Nacional recibió el primer aviso sobre el uso de tarjetas de residencia falsas el 1 de noviembre de 2020, y un segundo aviso el 31 de enero de 2025. Una investigación realizada en febrero de este año confirmó que 19 trabajadores presentaron documentos falsos, lo que llevó al operativo del viernes, en el que fueron arrestados cuatro empleados.
“¿Mandaron tropas armadas y enmascaradas al vecindario con armas militares solo por papeles falsos?", dijo el concejal de San Diego Sean Elo-Rivera. "Eso es una reverenda tontería.”
En su cuenta de Instagram, Elo-Rivera calificó a los agentes de ICE como “terroristas” y al operativo como “terrorismo patrocinado por el Estado”. Ese comentario llamó la atención de Stephen Miller, jefe adjunto de gabinete de la Casa Blanca, quien respondió en X: “Están alentando abiertamente la violencia contra las fuerzas del orden para facilitar la invasión de Estados Unidos.”
Sin embargo, Elo-Rivera no se retractó.
“Stephen Miller y Donald Trump, como cualquier matón, no soportan que los confronten", expresó. "Y cuando alguien los enfrenta, intentan intimidar de nuevo. Le llamo fascista porque eso es lo que es.”
Por su parte, Buona Forchetta declaró que todavía está revisando las acusaciones mencionadas en la orden judicial.